A excepción de la final de la copa del Rey que se juega esta tarde, el tema de ayer y hoy por excelencia es el bien conocidos por todos Debate sobre el Estado de la Nación.
Empezó ayer con el discurso del Presidente y con la opinión de todos los medios de comunicación que adelantaban la soledad del gobierno ante el resto de los grupos.
La intervención de los pesos pesados de la cámara marcó el día de ayer, pero con una diferencia, el Presidente marcó las líneas y el discurso con una batería de medidas, al parecer inesperadas por la Cámara en un momento y lugar que quizás nadie esperaba.
Las medidas del Presidente, a grandes rasgos, son un incipiente cambio de modelo productivo y social, abandonando las típicas actuaciones liberales o económicas tradicionales, como se le achacó al Presidente por no hablar de la reforma del paro (que lo hará, pero no en el DEN), pero sin abandonar la actual crisis en la que se encuentra el país y el mundo entero.
Medidas como la bajada del impuesto de sociedades a empresas pequeñas que no destruyan empleo, recorte de gasto desde el Gobierno, y a destacar, las reformas en materia de educación como el Proyecto Escuela 2.0, dotando de nuevas tecnologías a las aulas y apoyo para los estudios de postgrado y un nuevo Plan Avanza 2.
Que significa todo esto? A mi modo de ver, esto supone un giro sustancial en la orientación del país y el comienzo de una transición hacia un modelo de crecimiento basado en sectores con una clara vocación de futuro y con capacidad de generación de puestos de trabajos de calidad.
Otra medida de alto calado es el cambio en materia tributaria respecto a la compra de vivienda. Sabiendo el gran problema estructural que tiene España con el mercado inmobiliario, esto supone una ruptura con el pasado, y un mirar hacia otro lado abandonando la estrategia del ladrillo.
No se ha visto bien, pero se debe de analizar desde una doble vertiente: la primera es dar salida a corto plazo del stock inmobiliario existente, y dos, dejar de proteger una política que no nos ha llevado a la catástrofe del ladrillo, que es suavizar los beneficios fiscales que tiene la compra de una vivienda, lo cual ha ayudado enormemente a fomentar esa cultura del ladrillo.
Como conclusión y haciendo mención a los titulares de ayer que indicaban que el Gobierno estaba solo, continuando hoy el debate, el Presidente ha tendido la mano a TODOS y este ofrecimiento está siendo respondido por los grupos con su predisposición a colaborar, por lo que haciendo un breve balance parece que esa soledad no es tan grande, quizás el motivo es que el Presidente y el Gobierno está presentando medidas beneficiosas para todos...
Por cierto, sigo sin ver a Rajoy presentar alguna medida concreta.
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